El jefe Seattle le escribe una carta muy emotiva al presidente de los EEUU ,aclarando que si bien necesita que las tierras se vendan tambíen deberán cuidarlas y respetarles en honor a los antepasados y a los que estarán por venir y habitar las tierra que los pieles rojas vivieron durante toda la vida.
“Habéis de saber – dice Seattle – que cada partícula de esta tierra es sagrada para mi pueblo. Cada hoja resplandeciente, cada playa arenosa, cada niebla en el oscuro bosque, cada claro y cada insecto con su zumbido son sagrados en la memoria y experiencia de mi pueblo”. Cada hombre de la tribu y más aún, cada ser vivo e inerte de la naturaleza es entendido y tratado en la consmovisión del gran Jefe como parte del conjunto armónico que es la naturaleza, cuando afirma: “somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros”.
El jefe Seattle vendera las tierras a EEUU, pero prometen cuidarla y tratarla como debe ser.
http://www.elhistoriador.com.ar/articulos/mundo/carta_gran_jefe.php
“Habéis de saber – dice Seattle – que cada partícula de esta tierra es sagrada para mi pueblo. Cada hoja resplandeciente, cada playa arenosa, cada niebla en el oscuro bosque, cada claro y cada insecto con su zumbido son sagrados en la memoria y experiencia de mi pueblo”. Cada hombre de la tribu y más aún, cada ser vivo e inerte de la naturaleza es entendido y tratado en la consmovisión del gran Jefe como parte del conjunto armónico que es la naturaleza, cuando afirma: “somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros”.
El jefe Seattle vendera las tierras a EEUU, pero prometen cuidarla y tratarla como debe ser.